Os voy a contar algo que a mas de una pintora del blog va a llenar de orgullo y le confirmará lo que ya daba por hecho: El origen del arte no es algo masculino.
Aunque siempre se ha representado a los primitivos artistas como varones que se encargaban de hacer las pinturas mientras las féminas cuidaban de los niños, el estudio anatómico de las manos representadas en las cuevas demuestra que fue algo indistinto. Hay la misma proporción de manos femeninas como masculinas.
Los cambios sociales y que la historia no ha reflejado el número real de artistas mujeres que ha habido realmente ha hecho que tengamos actualmente la percepción de la historia del arte como una tarea eminentemente masculina...
Pero en nuestras rocas está la prueba de que eso no ha sido así.
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