Hemos establecido cinco requisitos o exigencias, a tener en cuenta, para la manipulación de esta técnica, que al igual que ocurre con la acuarela... a tanta gente le resulta infranqueable. Partimos de una foto.
Por supuesto, que le parecerán insuficientes a más de uno, (y de dos); pero si se siguen escrupulosamente, podemos movernos con cierto grado de seguridad en el mundo del pastel.
1ª) Interpretar la realidad. No obcecarnos en trasladar fielmente lo que nos ofrezca la fotografía, tanto desde el punto de vista cromático como compositivo.
2ª) Tender a la simplificación de los espacios. Sintetizar
3ª) Economía de medios, nada de descargas pastosas. El color del papel elegido es fundamentamental: dejémoslo "respirar"
4ª)Limpieza en las maipulaciones: emblocar y fundir con los dedos pero sin insistir. ( Dos trapitos: húmedo y seco)
5ª) En la fase final, una vez "fijado" realizar las descargas de "acentos o toques de luz y contraluces"
Con estas premisas, y pasito a pasito hemos realizado el pastel de arriba.
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